Está el conde Drácula muy atareado en su castillo de Transilvania reparando su ataúd:
- ¡Igor!
- Decidme, mi señor.
- Acércame un destornillador.
- Aquí lo tenéis, mi señor.
- ¡El de cruz no! ¡¡El de cruz no!!
__________________ [B][COLOR="green"]"Si uno empieza por permitirse un asesinato, pronto no le da importancia a robar, del robo pasa a la bebida y a la inobservancia del día del Señor, y se acaba por faltar a la buena educación y por dejar las cosas para el día siguiente."[/COLOR] (Thomas de Quincey)[/B]
[CENTER] [/CENTER]
|