Un día decidí no volver a la plaza de toros de Cáceres, mientras el fraude y las exigencias de las "figuritas", no sea cortado radicalmente...El problema es que el público de provincias no exige, y va a la plaza a sacar el pañuelo con nada que se haga, y con el único objetivo de que todos los diestros salgan a hombros. Es como si quisieran justificar de ese modo, los precios abusivos que se cobran. Salud.

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