Las noticias parecen confusas. Mientras ayer se afirmaba por diversos medios la ruina del proyecto, hoy parece que Hispasat quiere infundir confianza indicando que, en todo caso, la vida útil del satélite estará por encima de los diez años.
Si ello es cierto o sólo una maniobra frente a los accionistas, y, en todo caso, ante la inminente decisión de aceptar lo no a entrega del satélite y, sobre todo, la posibilidad de perder la concesión de la posición orbital a 61 grados Oeste -como señalan algunas fuentes-, ya se verá. Los intereses en juego son muchos.
Habrá que seguir de cerca las noticias de los próximos días. ¡Ojalá el satélite aguante lo suficiente! Pero, ya de entrada, estos problemas pueden suponer un freno a posibles operadores que quisieran contratar capacidad de forma permanente.
Saludos.
|