Un coche nuevo, después de un año, lo veo francamente dificil. Pero el que te solucionen tu avería, si, sin problemas.
Es una avería de estas pejigueras, que dan la lata bastante para encontrar, y los concesionarios no siempre se molestan en dedicarles tiempo. Pero si hay voluntad de encontrarla, antes o depués, aparece. Te cuento un caso:
Mi hermano se compró un Seat Altea, un TDI 140 CV con acabado Sport-Up. Se le montaron unas cubiertas 225 en llanta 17, y empieza a andar... y a gastar las delanteras mal (se las come por dentro). Se alinea en el concesionario oficial en garantía, un par de miles de kilómetros más... y mismo problema. Nuevo alineado... y cubiertas destrozadas con 6.000 kilómetros.
Se monta un nuevo juego de cubiertas (Bridgestone Potenza), y a los pocos kilómetros se vuelve a encontrar el mismo problema. Nuevamente a la Seat, y el impresentable del jefe de taller nos dice ¡¡¡que es normal que los gaste así!!!, que el coche tiene mucha potencia y tiende a abrir la dirección. La solución que ofrece, hacer el alineado y equilibrado de cubiertas cada 4.000 kilómetros...
Hartos de este concesionario y de la poca formalidad del jefe de taller, las siguientes revisiónes se pasan en otro concesionario oficial que se encuentra a 40 kilómetros de la localidad de residencia. Ya cumplida la garantía del coche, se le comenta al jefe de taller que, extrañado, pide permiso para inspeccionar en profundidad el coche. Mi hermano le dice que está dispuesto a pagar lo que sea con tal de que desaparezca el fallo del coche, a lo cual este hombre pide un par de dias y se queda con el coche. A los dos dias, llama por teléfono y nos pide que pasemos por allí a recogerlo. Nos saca un pliego de papel con cientos de puntos, y nos muestra que es nada menos que de una bancada láser, de las que se utilizan para medir los chasis para alinearlos. En esa bancada, aparece, oh, casualidad, un desplazamiento de unos milímetros en la cuna del motor, que se corrige sin problemas. Hasta el día de hoy, las ruedas se gastan perfectamente planas, y a sus casi 80.000 kilómetros el coche no ha vuelto a dar problemas. Ah, por cierto... el jefe de taller se negó a cobrar el arreglo, alegando que el problema había aparecido en garantía y que si no se había resuelto había sido por "desgana" del concesionario primero
Por eso te digo, Biztor, que muchas veces es más cuestión de ganas del concesionario que de capacidad o de que la avería sea jodida de reparar...
Te podría contar otra historia con un compresor del climatizador del mismo Altea, pero ya nos alargamos mucho
Saludos desde el sur
Efebo